sábado, 17 de marzo de 2012
31. Parar el mundo
miércoles, 22 de febrero de 2012
30. Las olas
viernes, 17 de febrero de 2012
29. Un astro
lunes, 17 de octubre de 2011
28. Don Juan
Por eso un hombre de conocimiento elige un camino con corazón y lo sigue; y luego mira y se regozija y se ríe; y luegi ve y sabe. Sabe que su vida se acabará en un abrir y cerrar de ojos; sabe que él, sí como todos los demás, no va a ninguna parte;sabe, porque ve, que nada es más importante que todo lo demás. En otras palabras, un hombre de conocimiento no tiene honor, ni dignidad, ni familia, ni nombre, ni tierra, solo tiene una vida que vivir.
Una realidad aparte, Carlos Castaneda
jueves, 28 de julio de 2011
26. El retrato de Dorian Gray
-¿Realmente ejerce usted una influencia muy mala, Lord Henry? ¿Tan mala como dice Basil?
- No existe eso que se llama una influencia buena, señor Gray. Toda influencia es inmoral. Inmoral desde el punto de vista científico.
-¿Por qué?
- Porque influir en alguien es darle el alma. Ya no piensa sus propios pensamientos, ni se consume en sus propias pasiones. Sus virtudes no son reales para él. Sus pecados, si es que hay cosas tales, son prestados. Se convierte en un eco de la música de otro, un actor de un papel que no ha sido escrito para él. El propósito de la vida es el desarrollo de uno. Llegar a realizar a la perfección la naturaleza de uno, eso es para lo que todos nosotros estamos aquí. La gente se tiene miedo a si misma hoy en día. Ha olvidado el más elevado de todos sus deberes, el deber que se debe uno a sí mismo.
El retrato de Dorian Gray, Oscar Wilde
miércoles, 27 de julio de 2011
25. Maldita, maldita
Está tumbada en su cama con los pies en la almohada e intentando leer, lleva poco más de una hora en la misma página. Maldita imaginación, maldita, maldita imaginación. El libro le gusta, le fascina, El retrato de Dorian Gray, pero éste no consigue, desde hace un par de días, captar su atención durante más de tres líneas seguidas.
En su cabeza se repite el mantra, no lo pienses, es mentira, es una mierda, pero ¡qué genial!/ no lo pienses, es mentira, es una mierda, pero ¡qué genial!
Se harta de la página del libro y se pone a escribir. Como no tiene valor para explicarse ni a si misma lo que de verdad le ronda la cabeza, escribe sobre una chica que está tendida en la cama y que como no podía leer se ha puesto a escribir.
La broma le hace hasta gracia, el eterno retorno, pero dudo que nadie la creyese divertida si posase la mirada en su expresión.